¿Cuándo pueden comer ciruelas los bebés?

Después de introducir los sólidos a tu bebé, tendrás una lista de alimentos que te gustaría que tu bebé probara. En cuanto a las frutas, mucha gente tiene debilidad por las ciruelas, ya que son beneficiosas para la salud. Pero si las ciruelas deben darse a los bebés o no, sigue siendo una pregunta habitual entre los padres. Lee este artículo para saber si las ciruelas son seguras para los bebés y cuándo puedes empezar a dárselas a tu pequeño.

¿Las ciruelas son seguras para los bebés?

Por supuesto. Las ciruelas son una de esas frutas que contienen una serie de nutrientes esenciales para favorecer el rápido crecimiento de los bebés. Además, su sabor especial puede estimular las papilas gustativas e introducir un nuevo sabor en el paladar de tu hijo.

¿Cuándo se puede introducir la ciruela en la dieta del bebé?

Las ciruelas pueden introducirse cuando el bebé cumpla 10 meses aproximadamente. La mejor forma de hacerlo es en forma de puré, pero no debe ser lo primero que pruebe tu bebé. Pide siempre la recomendación de tu médico antes de introducir algo nuevo a tu hijo.

Pero antes de hacerlo, echa un vistazo al valor nutricional y los beneficios para la salud de las ciruelas. Siempre es mejor informarse antes de consultar a un experto para tener preparadas tus preguntas para que las resuelva durante la visita.

Beneficios para la salud de los bebés

Las ciruelas son extremadamente nutritivas y aportan una tonelada de nutrientes también en la porción más pequeña.

Tienen un alto contenido en fibra, por lo que alivian los problemas digestivos e incluso el estreñimiento.

Preparar papillas para bebés con ciruelas es la forma más fácil de mantener todos los nutrientes existentes y dárselos a tu hijo.

Las ciruelas secas, también llamadas ciruelas pasas, actúan como estimulantes digestivos.

Cómo elegir y conservar las ciruelas para la alimentación infantil

Al comprar ciruelas, asegúrate de que estén blandas pero no demasiado. Al apretar una ciruela, debe presionarse un poco y no quedarse dura. Comprueba la punta de la ciruela. Si está blanda, es señal de que está fresca.

El color debe ser bonito e intenso, sin ninguna mancha en la superficie. A veces puede haber una ligera capa blanca en la piel, lo que es una buena señal de que la ciruela no ha sido tocada.

Hay que evitar las ciruelas duras, ya que no están maduras y no tendrán un gran sabor. Las ciruelas tienden a madurar rápidamente. Si compras ciruelas que no están maduras, déjalas al aire libre durante un tiempo. Después, guarda las ciruelas maduras en la nevera. Si quieres utilizarlas después de unos días, lo mejor es congelarlas completamente. Es aconsejable quitarles los huesos antes de congelarlas.

Puré de ciruelas espeso y sabroso

Qué necesitarás:

  • Ciruelas frescas
  • Agua a temperatura ambiente y agua helada

Cómo se hace:

  1. Lavar bien las ciruelas. Pon suficiente agua en una cacerola y llévala a ebullición. A continuación, añade las ciruelas y deja que hiervan durante otros 10-15 minutos.
  2. Poner el agua helada en otro recipiente.
  3. Retira suavemente las ciruelas del agua hirviendo con una espumadera y ponlas inmediatamente en el agua fría. Ten cuidado de no añadir el agua hirviendo a la fría.
  4. Sacar las ciruelas y pelarlas con los dedos o con un cuchillo.
  5. Córtalas por la mitad y quítales las pepitas. Poner todas las ciruelas en una batidora y batirlas hasta formar un puré. Puedes añadir un poco de agua para diluir el puré o un poco de leche materna para que quede cremoso.

También te puede interesar:

***El contenido de este sitio web es solo para fines informativos, es de carácter general y no está destinado a diagnosticar, tratar, curar o prevenir ninguna enfermedad, y no constituye asesoramiento profesional. La información en este sitio web no debe considerarse completa y no cubre todas las enfermedades, dolencias, condiciones físicas o su tratamiento. Debe consultar con su médico antes de comenzar cualquier programa de ejercicios, pérdida de peso o atención médica y / o cualquiera de los tratamientos de belleza.