Revisión ginecológica tras el parto. ¿Qué debes saber?  primera citología después del parto

Cita con el médico posparto ¿Debes esperar seis semanas? Cuándo ver al médico y por qué.

El cuerpo experimenta muchos cambios durante el embarazo y el parto. Por eso, después de que nazca el bebé, tu cuerpo necesita tiempo para recuperarse. Mientras se recupera, es importante que solicites una cita con tu ginecólogo para que te atienda después del parto. Esto es lo que necesitas saber sobre la visita posparto, incluyendo cuándo ver a tu médico y qué puedes esperar.

El período posparto

La etapa que viene después de tener un bebé se denomina período posparto o posnatal. Se divide en tres fases.

  1. La primera fase es la recuperación inicial durante las primeras seis a doce horas después del parto.
  2. La segunda fase dura de dos a seis semanas, mientras tu cuerpo se recupera físicamente y te adaptas a la vida con tu recién nacido.
  3. La tercera parte es la vuelta gradual de tu cuerpo a como estaba antes del embarazo. Por supuesto, es posible que algunas cosas no vuelvan a ser del todo como antes. Este periodo de curación puede durar hasta seis meses.

Posparto, Cuándo ver al médico

En el pasado, la revisión posparto era una visita única programada entre cuatro y seis semanas después del parto. Sin embargo, las ideas sobre la atención posparto han cambiado en los últimos años. Los expertos en salud consideran ahora que la atención posparto es un proceso continuo basado en las necesidades de cada persona.

Las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicadas en 2013 recomiendan al menos cuatro revisiones posnatales después del parto: En las primeras 24 horas, al tercer día, entre 7 y 14 días y a las seis semanas.

Tras la atención inicial en el momento del parto, el primer contacto o visita posparto debe producirse en las tres semanas siguientes. Debes permanecer en contacto con tu médico durante los primeros tres meses, y un examen posparto completo y exhaustivo debe ocurrir a más tardar a las doce semanas.

Por qué necesitas ir

Después de tener un bebé, experimentas cambios físicos y emocionales.

Una visita al médico durante este tiempo puede ayudar a prevenir complicaciones. Si algo no va bien, el médico puede detectarlo y tratarlo a tiempo antes de que se convierta en un problema.

Esta cita también es el momento de hablar con el médico sobre temas delicados y obtener respuestas a las preguntas que pueda tener sobre los loquios, los anticonceptivos, la depresión posparto y mucho más.

Todas las mujeres embarazadas deben recibir atención posparto, incluso si el embarazo termina con una pérdida. La atención y el apoyo físico y emocional son aún más importantes en un momento tan difícil.

Qué esperar de la revisión posparto

Debes acudir a tu médico o hablar con él por teléfono en las tres semanas siguientes al parto. Si tienes una cesárea, complicaciones u otros problemas de salud, puedes ver a tu médico antes y mantenerte en contacto con él más a menudo mientras se cura.

En tu primera visita, pasarás algún tiempo hablando con tu médico. Es posible que el médico también te controle la tensión arterial o te haga un seguimiento de cualquier otra preocupación. A medida que tu asistencia continúa, el equipo médico puede mantener el contacto contigo de diversas maneras. Puedes ir a la consulta o hablar con el médico por teléfono.

A medida que la atención posparto se acerca a su fin, debes someterte a un examen exhaustivo de salud. El examen puede tener lugar a partir de las cuatro semanas después del parto, pero no más tarde de las 12 semanas, dependiendo de tu situación. Esta visita es un chequeo completo de tu salud física, social y psicológica.

Durante esta cita, se te hará un examen físico completo. El médico puede:

  • Comprobar el peso.
  • Tomar la tensión arterial.
  • Revisar el perineo para ver cómo se está curando.
  • Revisar una episiotomía, un desgarro o una herida de cesárea si la tienes.
  • Comprobar si el útero se está reduciendo como se esperaba.
  • Revisar tus pechos y hablar sobre la lactancia materna.
  • Hablar de cualquier problema de salud que tengas.
  • Hablar contigo sobre la tristeza y la depresión posparto.
  • Responderá a las preguntas que puedas tener.
  • También puede hacerse la revisión ginecológica general si corresponde.

Puede incluir una prueba de Papanicolaou, un análisis de sangre para comprobar si tienes anemia o un nivel alto de azúcar en la sangre, y un análisis de orina si tienes problemas urinarios o síntomas de una infección del tracto urinario.

El médico también te hablará de:

  • Cómo se recupera tu cuerpo del parto.
  • Tus emociones y cómo te sientes con respecto a la maternidad.
  • Tu estado de ánimo.
  • Cualquier tipo de ansiedad o depresión que puedas sentir.
  • Cómo estás durmiendo.
  • La alimentación y tus hábitos alimenticios.
  • Cómo va el cuidado de tu bebé.
  • Cómo va la alimentación con biberón o la lactancia materna.
  • Cualquier preocupación sobre relaciones íntimas.
  • El control de la natalidad.
  • El control de cualquier problema de salud, como la presión arterial alta, la diabetes u otras afecciones.
  • Seguimiento con otros profesionales de la salud de cualquier problema que puedas tener.

Lleva anotadas tus preguntas

Seguro que tienes preguntas, sobre todo si acabas de tener tu primer bebé. Pero, como el embarazo y el parto pueden ser muy diferentes con cada niño, las mamás con experiencia también pueden tener preguntas.

A medida que vayan surgiendo preguntas, escríbelas para poder llevarlas a tu cita. Si no las anotas, es posible que no recuerdes todo lo que quieres preguntar una vez que estés sentada en la consulta. Y recuerda que no hay preguntas tontas. No debes sentirte incómoda o avergonzada por preguntar algo a tu médico. Esa es una de las razones por las que están ahí, y quieren ayudar. Algunas de las cosas sobre las que puede querer preguntar son:

  • El parto.
  • El proceso de curación.
  • Cómo prevenir problemas ahora y en el futuro.
  • El control de la natalidad.
  • Relaciones íntimas.
  • Tampones.
  • Ejercicio.
  • Lactancia.
  • Problemas con los senos, como dolor o bultos.
  • Cuidado del recién nacido.
  • Vuelta al trabajo.

Síntomas a tener en cuenta

Puede que los molestos síntomas del embarazo hayan desaparecido por fin, pero el periodo posparto tiene su propio conjunto de molestias. La mayoría de las veces, los síntomas posparto son comunes y esperables. Sin embargo, a veces pueden ser un signo de una complicación. Por lo tanto, debes hablar de todos tus síntomas con tu médico. El médico puede tranquilizarte sobre lo que es normal y ayudarte a encontrar alivio, pero también estudiar cualquier síntoma preocupante. Debes hablar con tu médico sobre:

  • La cantidad y el color del sangrado que experimentas.
  • Dolores de cabeza.
  • Dolor.
  • Hemorroides.
  • Estreñimiento.
  • Pérdida de orina.
  • Sudoración.
  • Fatiga.
  • Cómo te sientes.
  • Si está triste o con mucho estrés.

Cuándo consultar al médico

No tienes que esperar a tu cita posparto para hablar o ver al médico si tienes preocupaciones urgentes. Debes llamar al médico o acudir al hospital si tienes:

  • Fiebre superior a 38 grados.
  • Sangrado cada vez más abundante.
  • Dolor intenso.
  • Hinchazón en el cuerpo, especialmente en las manos o la cara.
  • Náuseas y vómitos.
  • Dolor de cabeza que no desaparece o empeora.
  • Sangrado o flujo vaginal maloliente.
  • Dificultad para cuidar de ti misma y de tu bebé.
  • Sentimientos de depresión.
  • Dolor, ardor al orinar o frecuencia urinaria.

Aunque hay cosas que pueden dificultar o incomodar el momento de ir, debes hacer todo lo posible por acudir al médico. Si tienes que llevar a tu bebé contigo, puedes hacerlo.

Saltarse la atención posparto puede tener algunas consecuencias no deseadas:

  • Puede que no te des cuenta de que tienes una infección o una complicación posparto.
  • Es posible que no te recuperes bien.
  • Podrías volver a quedarte embarazada rápidamente.
  • Podrías tener una depresión posparto no diagnosticada.

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