¿Qué hacer si el bebé se golpea la cabeza?

Cuando un bebé se cae de la cama de cabeza, es difícil que no cunda el pánico. Cómo evaluar adecuadamente la situación y reaccionar correctamente.

Aunque tomaste todas las precauciones, bastó un segundo de falta de atención para que el bebé cayera al suelo. Con los niños pequeños, siempre es la cabeza la que golpea el suelo primero, no importa cómo se caiga. Y por una buena razón, hasta aproximadamente los 4 años de edad, la cabeza y el cuerpo están desequilibrados. Aunque suele ser impresionante, en la gran mayoría de los casos la caída de un bebé en la cabeza no es grave. Pero, obviamente, no es lo mismo caerse de la cama de los padres sobre la moqueta que del sofá o de una silla sobre las baldosas. Por eso es importante saber evaluar la situación para poder reaccionar adecuadamente. ¿Cuándo hay que preocuparse y cuándo hay que ir a urgencias? ¿Cómo reaccionar y qué seguimiento hay que hacer después de una caída del bebé de cabeza?

Mi bebé se ha caído de cabeza, ¿debo llevarlo a urgencias?

Si después de caer sobre su cabeza, el bebé lloró inmediatamente y el llanto cesó muy rápidamente, no es necesario ir al hospital. En efecto, se trata de un traumatismo benigno. Sin embargo, cuando se produce una pérdida de conciencia corta o larga, que puede ir acompañada o no de llanto, hay que acudir inmediatamente a las urgencias pediátricas de un hospital. Esto es para comprobar la presencia de un hematoma subdural. En este caso, el hematoma se extrae quirúrgicamente para evitar la compresión del cerebro. En la gran mayoría de los casos, no hay secuelas neurológicas cuando el hematoma se evacua rápidamente. También es importante saber que si un bebé tiene una contusión cerebral, su cerebro no se comprime tanto como en los niños mayores o en los adultos. Y por una buena razón, su cráneo no está completamente fusionado debido a la presencia de la fontanela que es una verdadera válvula de seguridad.

¿Qué seguimiento es necesario en las horas posteriores a la caída?

Un bebé que se ha caído de cabeza debe permanecer bajo vigilancia durante las primeras 12 horas después de su caída, aunque no haya perdido el conocimiento. Debes estar atento a los siguientes síntomas:

  • Vómitos, que pueden deberse a la hipertensión intracraneal.
  • Alteraciones de la conciencia. El bebé no está tan animado como de costumbre, mira fijamente al espacio, no sonríe ni juega. Tiene un comportamiento triste y apático.
  • Una marcha menos segura cuando el bebé ya puede caminar. Esto ocurre cuando el niño se ha caído sobre el cerebelo, la zona del cerebro que da precisión al movimiento.

Si el bebé presenta alguno de estos síntomas tras un traumatismo craneal, es necesario acudir al hospital. Si el bebé se cayó por la mañana, los padres deben vigilarlo durante todo el día. Si la caída se ha producido por la tarde o por la noche, los padres deben despertar al niño cuando se acuesten y vigilarlo durante la primera parte de la noche para ver si su comportamiento es normal. Si parece más apagado de lo normal, hay que ir a urgencias.

Golpes, heridas, fracturas...

También ocurre que el bebé se hace daño cuando se cae. La lesión más común es un golpe. En este caso, hay que presionar ligeramente la zona inflamada con hielo en un paño. Cuando hay una herida, el primer reflejo es comprimirla para detener la hemorragia. Si es lineal y fina, la aplicación de clorhexidina por la mañana y por la noche debería ser suficiente. En cambio, si es grande (más de 2 o 3 mm), debes acudir a urgencias para que pongan uno o varios puntos de sutura. Además, si uno de las extremidades no se mueve más, puede ser por una fractura y no por un ataque cerebral. Los padres deben entonces intentar inmovilizar el miembro fracturado lo mejor que puedan y acudir a urgencias o llamar al 112.

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