¿Cómo se hace la prueba de embarazo casera con lejía?

Un retraso o ausencia de la menstruación puede hacer que una se pregunte si está embarazada. Algunas parejas pueden considerar la posibilidad de hacerse una prueba de embarazo casera, como una prueba de embarazo casera con lejía. Pueden considerar este tipo de pruebas como una prueba preliminar o porque no tienen acceso a kits de pruebas de embarazo caseras de forma inmediata. Pero, ¿es precisa la prueba?

En qué consiste la prueba de embarazo con lejía

La prueba de embarazo con lejía es un método tradicional, cómodo y económico para determinar si estás o no embarazada. Si te da reparo comprar un kit de embarazo en la farmacia o no quieres acudir a una clínica, esta prueba puede ser una opción práctica para que la pruebes en casa.

¿Es fiable la prueba de embarazo con lejía?

No hay estudios que avalen este método. No se puede decir que la prueba de embarazo con lejía sea 100% precisa. Sin embargo, puede dar un resultado correcto si lo intentas entre cinco y diez días después de no tener la regla, cuando los niveles de hCG pueden detectarse en la orina. En caso de que el resultado sea negativo y aún no tengas la menstruación, puedes volver a hacer la prueba.

Sigue leyendo para conocer la ciencia que hay detrás de esta prueba de embarazo casera.

¿Cómo funciona?

Una vez que el embrión se implanta en el útero, la placenta produce una hormona llamada hCG o gonadotropina coriónica humana. Esta hormona se encuentra en la orina de las mujeres embarazadas. Por ello, la presencia de esta hormona se considera un signo de embarazo.

Cuando se mezclan la hCG en la orina y la lejía (hipoclorito de sodio), se forma espuma o burbujas que indican que estás embarazada. Si no hay reacción cuando la orina entra en contacto con la lejía, sugiere la ausencia de hCG, lo que significa que no estás embarazada. El tipo o la calidad de la lejía que utilices también puede influir en los resultados de esta prueba.

¿Qué lejía utilizar para esta prueba?

Puede utilizar la lejía estándar que se utiliza para la limpieza u otros fines en casa. No utilices lejía de uso industrial ni lejía coloreada y perfumada, ya que pueden tener ciertas sustancias químicas que podrían alterar los resultados.

Precauciones de seguridad: Evita utilizar lejía con amoníaco y evita cualquier contacto directo de la lejía con la piel o los ojos, ya que puede causar irritación y ardor.

Cómo hacer la prueba de embarazo con lejía

Necesitarías:

  • Lejía doméstica sin amoníaco.
  • Dos vasos para la prueba, marcados como vaso A y vaso B.
  • Una muestra de orina (fresca).

Sigue este paso a paso para realizar la prueba:

  • Paso 1: Toma una muestra de orina fresca en el vaso A. Llena 1/4 del vaso, idealmente orinando directamente en el vaso.
  • Paso 2: Añade lejía en el vaso B, aproximadamente 1/4 de taza. Asegúrate de que utilizas una cuchara desechable para añadir la lejía y no los cubiertos reutilizables que se usan para comer, ya que la lejía es tóxica y puede permanecer en la cuchara incluso después de lavarla.
  • Paso 3: Vierte la lejía del vaso B en el vaso que tiene la orina. Procura hacerlo lentamente dando tiempo a que la mezcla reaccione.
  • Paso 4: Espera unos minutos para observar la reacción.

Una orina espumosa podría indicar un resultado positivo de embarazo.

Interpretación de los resultados de la prueba de embarazo con lejía

  • Prueba de embarazo positiva con lejía: Si encuentras alguna efervescencia o espuma en la reacción, podría ser indicativo de un resultado positivo.
  • Prueba de embarazo negativa con lejía: Si no hay reacción, es negativa y no estás embarazada.

¿Puede la prueba de embarazo con lejía dar un falso positivo?

Sí, puede ocurrir si estás tomando algún medicamento prescrito en los tratamientos de fertilidad. Estos medicamentos contienen hCG, que al mezclarse con la orina puede provocar burbujas o efervescencia dando así un resultado falso positivo.

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