¿Por qué Cambia la vista durante el embarazo?

Alteraciones visuales durante el embarazo

En efecto, la vista de una mujer embarazada puede sufrir ciertas variaciones: se calcula que la vista de una de cada cuatro mujeres se verá afectada por los cambios hormonales. Afortunadamente, esta situación suele ser temporal y todo vuelve a la normalidad sin intervención algún tiempo después del parto. Pero, ¿Qué provoca estos cambios?

Retención de Líquidos

En primer lugar, las mujeres embarazadas son propensas a la retención de líquidos: esto también puede ocurrir en la córnea. Esta retención de agua puede provocar la hinchazón o el engrosamiento de la córnea (la membrana transparente que cubre el ojo). Inicialmente, el engrosamiento de la córnea provoca un aumento de su sensibilidad, mientras que la inflamación puede afectar a los nervios asociados, que son los responsables de sentir el dolor. Reducir la retención de líquidos puede hacer desaparecer este síntoma.

El engrosamiento de la córnea modifica la curvatura de la superficie del ojo. Como resultado, la luz ya no entra en el ojo de la misma manera que antes, lo que afecta a la formación de imágenes en la retina y modifica la visión, lo que puede provocar una miopía leve. Durante el tercer trimestre, también es de esperar que se produzcan fugas de líquido entre las membranas, lo que provoca una distorsión de la visión.

Hormonas

Además de la retención de líquidos, las hormonas del embarazo también influyen. Algunos expertos afirman que las hormonas liberadas durante el embarazo pueden hacer que la glándula pituitaria del cerebro se hinche. Esta hinchazón provocaría entonces una presión sobre el nervio óptico, que tendría como efecto la alteración del campo de visión de la embarazada. Se ha observado una disminución de la presión en el ojo de aproximadamente un 20%, debido a la mayor elasticidad del tejido. Esto haría que la pared del ojo fuera menos rígida.

Alteraciones visuales

La dificultad repentina para ver a distancia o en la oscuridad (ceguera nocturna), la sequedad ocular y la intolerancia a las lentes de contacto son los problemas más comunes que experimentan las mujeres embarazadas. Estos pequeños problemas de visión, que suelen producirse en el último trimestre del embarazo, son temporales y bastante comunes. Si no tenías problemas de visión antes del embarazo, no necesitas comprar gafas, a menos que tu seguridad esté en juego si el problema no se corrige rápidamente. Esto se debe a que la situación es temporal y se estima que 5-6 semanas después de dar a luz, todo debería volver a la normalidad. Si usas gafas, es mejor que esperes hasta dos meses después del parto para hacerte una prueba ocular. Así se puede determinar si tu miopía, por ejemplo, ha empeorado ligeramente o no.

Lentes de contacto en el embarazo

🤰🏻👶🏻🎁 Crea tu lista de nacimiento y actualízala siempre que quieras. Comparte tu lista con familiares y amigos para que puedan acertar con el regalo que necesitas ⇓⇓⇓lista de nacimiento bebe 

El uso de lentes de contacto puede resultar incómodo o incluso doloroso, especialmente durante el tercer trimestre, ya que la sensibilidad de la córnea aumenta gradualmente a lo largo del embarazo. En este punto, las lentes pueden dañar la superficie de la córnea, haciendo que los ojos se enrojezcan y duelan. Algunas mujeres simplemente no pueden seguir usando lentillas y tienen que usar las gafas. Pero, de nuevo, esto no es nada para alarmarse y desaparecerá por sí solo.

Por otro lado, es muy común que las mujeres embarazadas tengan los ojos secos o sufran un abultamiento de los párpados. Estos ligeros problemas de visión pueden provocar dolores de cabeza y migrañas. Estos son incómodos, pero no son motivo de preocupación. Para prevenirlos, bebe mucha agua y evita el consumo excesivo de sal. En verano, acostúmbrese a llevar gafas de sol.

Consulta a un médico

La mayoría de los problemas oculares durante el embarazo no son especialmente peligrosos y suelen ser reversibles. Sin embargo, algunos de ellos también pueden ser un signo de una enfermedad más grave. La hipertensión, por ejemplo, puede manifestarse como problemas de visión (ver manchas oscuras, visión borrosa). La aparición de manchas luminosas o de una visión doble, borrosa y debilitada durante más de dos horas es un posible signo de preeclampsia (hipertensión gestacional), mientras que la visión borrosa puede indicar niveles altos de azúcar en sangre (diabetes).

🔅 También te puede interesar leer:

***El contenido de este sitio web es solo para fines informativos, es de carácter general y no está destinado a diagnosticar, tratar, curar o prevenir ninguna enfermedad, y no constituye asesoramiento profesional. La información en este sitio web no debe considerarse completa y no cubre todas las enfermedades, dolencias, condiciones físicas o su tratamiento. Debe consultar con su médico antes de comenzar cualquier programa de ejercicios, pérdida de peso o atención médica y / o cualquiera de los tratamientos de belleza.