¿Por qué mienten los niños?

Alrededor de los 4 ó 5 años, los niños comienzan a desarrollar su imaginación y a crear un mundo que a veces es muy diferente de la realidad que experimentan. Se inventan historias y pueden dar la impresión de que mienten. Pero si distorsiona la realidad, no se convierte en un mentiroso.

¿Por qué miente el niño?

A medida que se desarrollan, los niños de preescolar descubren su imaginación y creatividad y les encanta jugar a inventarse historias. Pero ante estas pequeñas mentiras, los padres pueden preguntarse y temer que este tipo de comportamiento tenga repercusiones en su vida de adolescente y de adulto. Sin embargo, ¡no es el caso! Se trata de una etapa perfectamente normal en el desarrollo del niño y desaparecerá gradualmente por sí sola.

Si les gusta divertirse "mintiendo" para jugar creando historias y personajes disparatados, también pueden hacerlo para ocultar un error o evitar un castigo. Es su forma de escapar de una situación desagradable. Pero también es una actitud que adoptan para agradar o valorarse ante sus padres o amigos.

También pueden mentir porque están celosos de un compañero de clase, porque sueñan con alcanzar la grandeza en los deportes o en las artes, o simplemente para ocultar la baja confianza en sí mismos.

En cualquier caso, a medida que crezcan, acabarán limitando este tipo de actitud, ya que poco a poco tomarán conciencia de la realidad y distinguirán entre el bien y el mal.

¿Cómo debemos reaccionar ante las mentiras de un niño?

Está claro que este aprendizaje de la verdad no se hace, por supuesto, en un día. Por tanto, el niño tardará en integrar esta noción y dejar de inventarse historias y mentiras. Para animarles a hacerlo, he aquí algunos consejos:

Enséñale la diferencia entre realidad y fantasía. Explica que no todas las historias de los libros se basan en la realidad, y proponle que invente historias contigo. Basta con explicarles lo importante que es decir siempre la verdad y darles ejemplos que les conmuevan y que entiendan fácilmente;

Tómate el tiempo de escuchar y jugar con el niño para fomentar su creatividad. Tampoco le castigues ni regañes cuando cuente historias imaginarias, deja que se exprese libremente. Puedes utilizar el humor al contar pequeñas mentiras, pero no te burles del niño, ya que esto puede provocar enfado y agravio.

Hazle saber que comprendes cuando utiliza la mentira para expresar sus deseos y anhelos, y convierte su invención en realidad para que tome conciencia de sus actos o emociones. Por ejemplo, di "¿quieres tomar clases de judo y luego convertirte en un campeón como en tu historia?

Si él/ella utiliza las mentiras para encubrir un error, no exageres y céntrate en buscar soluciones. Implícale para que sea consciente de que es responsable del error y de que no tiene sentido mentir, sino que decir la verdad ayudará a avanzar.

Elógielo cuando tenga el valor de decir la verdad, aunque signifique admitir un error. Alentar su buen comportamiento le dará confianza en sí mismo y le permitirá integrar que la verdad es siempre la solución correcta.

Por último, por tu parte, no le mientas. Dale el ejemplo adecuado, y no te escudes en una fórmula prefabricada como "los adultos hacen lo que quieren", pues crearías una gran confusión en su mente.

A veces, es sólo para evitar herir los sentimientos de los padres que un niño empieza a mentir. A los 7 u 8 años, sienten las emociones de los demás y descubren realmente la empatía. Entonces, están dispuestos a hacer cualquier cosa para evitar hacer daño a sus seres queridos. Así, puede recurrir a este tipo de comportamiento para protegerte, por ejemplo, durante un divorcio doloroso o en caso de preocupaciones familiares. No hacer que el niño se sienta culpable significa no darle la oportunidad de mentir.

Aprender a decir la verdad y tener el valor de admitir los errores no es fácil para un niño. Necesitarás tiempo, paciencia y mucha dulzura para ayudarles a integrar este valor de la honestidad, tan importante para su futura vida adulta y su integración en la sociedad.

🔅 También te puede interesar leer:

***El contenido de este sitio web es solo para fines informativos, es de carácter general y no está destinado a diagnosticar, tratar, curar o prevenir ninguna enfermedad, y no constituye asesoramiento profesional. La información en este sitio web no debe considerarse completa y no cubre todas las enfermedades, dolencias, condiciones físicas o su tratamiento. Debe consultar con su médico antes de comenzar cualquier programa de ejercicios, pérdida de peso o atención médica y / o cualquiera de los tratamientos de belleza.