pezoneras

¿Que son las pezoneras?

Las pezoneras son unos moldes, de silicona o látex, que se utilizan para que el pezón quede protegido durante la Lactancia Materna.

Se pueden adquirir infinidad de marcas y modelos que varían en su forma. Lo importante es que sea fino y parecido a la forma natural del pezón, para que interfiera lo menos posible.

¿Cuándo usar pezoneras?

Durante la lactancia surgen algunas complicaciones que pueden dificultar darle el pecho al bebé, mientras solucionas el problemas, puedes usar pezoneras en estos casos:

  • Grietas en el pezón: Cuando el bebé se agarra mal al pezón, aparecen las grietas, suele pasar mucho los primeros días debido a la inexperiencia del bebé y de la madre. Mientras se curan y buscas asesoramiento (matrona, expertos y/o grupos de apoyo de lactancia...) para que te enseñen las técnicas y posiciones correctas, puedes usar pezoneras, para evitar el dolor.
  • Síndrome de Rainaud del pezón: Los vasos sanguíneos de una zona de la piel, en este caso el pezón, se contraen excesivamente cuando es estimulada con frío o tacto, produciendo dolor intenso. No aparecen grietas, pero una vez el bebé suelta el pezón, éste toma un color blanco azulado durante un rato, hasta que al final recupera su color. Una solución puede ser aplicar calor antes e inmediatamente después dar el pecho. Las pezoneras también pueden ser útiles, ya que reducen los estímulos que desencadenan este síndrome.
  • Malformaciones faciales del bebé: Pueden hacer complicado que el bebé se agarre correctamente. Por ejemplo, en el caso de la micrognatia, donde la mandíbula inferior es anormalmente pequeña quedando la barbilla medio hundida y dificultando el agarre. Hay que buscar una postura adecuada para mejorar esta situación, por ejemplo, poner al bebé sobre la pierna de la madre (como a caballo) con la cabeza inclinada un poco hacia atrás y ofrecerle el pecho. También son útiles las pezoneras.
  • Frenillo en lengua o labios: Para solucionar el problema hay que cortar el frenillo. Hasta que esto suceda y para evitar grietas debido al mal agarre y mejorar el vaciado del pecho por parte del bebé, se pueden usar pezoneras.

El uso de pezoneras no produce gases al bebé. Un mal agarre, conduce a que coma mal y eso lleva al bebé a que lo haga con más ansiedad produciéndole gases. Por lo tanto, si se usa pezonera y el bebé come a demanda se reducirá su ansiedad por comer.

Si la pezonera está mal colocada, la fricción puede dañar la piel del pezón.

Si el bebé tiene hongos en la boca, éstos pueden permanecer en la pezonera. Para eliminarlos sólo tienes que ponerla a hervir un par de minutos con agua y una poco de bicarbonato. Y seguir las indicaciones del pediatra para tratar los hongos.

Cuando se solucione la causa por la que se está usando pezonera, no haya dolor y el bebé quede satisfecho en las tomas, éstas deben de dejar de usarse. Si llevas un tiempo usándolas y el bebé está muy adaptado a ellas, aprovecha para ir retirándolas cuando esté tranquilo o adormilado y no en momentos en los que tiene mucha hambre. Si llora o rechaza el pecho vuelve a ponerte la pezonera, e intenta otra vez en la siguiente toma, hasta que se vaya acostumbrado.

Para la limpieza de las pezoneras usa agua y jabón.