comunicacion hijos

La llegada de un bebé a casa conlleva un sentido de alegría y responsabilidad. Sabemos que lo que sucede en los primeros cinco años establece el escenario de cómo un niño se siente sobre sí mismo, cómo se relaciona con los demás y de cómo se enfrentará a la vida. La relación que tengas con tu hijo determinará su crecimiento y aprendizaje.

Proporcionarle seguridad

La principal prioridad para los padres es ayudar al bebé a sentirse seguro y profundamente amado. Estas sensaciones y emociones deben ser trasmitidas al bebé cuando exprese, a su manera, que está cansado, hambriento o necesita consuelo. Consolar a un bebé que llora o cogerlo en brazos no es malcriarlo: un abrazo tranquilizador le demuestra que es cuidado, amado y protegido.

Manejando sentimientos

A medida que un bebé crece y se convierte en un niño pequeño, la relación con ellos cambia. Empiezan hacer sus primeros movimientos hacia la independencia: ponerse su propia ropa, jugar felices un rato sin requerir la presencia constante de otras personas o alimentarse solos. Gradualmente, con apoyo, los niños pequeños aprenden a manejar sus propios sentimientos. Algunos niños entienden los sentimientos y que llevarse bien con los demás es relativamente fácil, mientras que otros pueden reaccionar con enojo si no pueden salirse con la suya y necesitan ayuda para calmarse.

Todos tenemos diferentes temperamentos y muchas veces habrá choques entre tu hijo y tú. Si este "presiona tus botones", intenta mantener la calma, respira profundamente y no te unas a la rabieta. En su lugar, desarrolla una estrategia para enfrentar la decepción: "Probemos de nuevo, y esta vez te ayudaré", por ejemplo.

Usa palabras para demostrar que le entiendes, como "Sé que te sientes triste" o "Puedo ver que estás molesto". Muéstrale cómo las personas afectuosas responden ante la angustia de alguien. Y no esperes que un niño de 3 años comparta todas sus cosas, espere su turno, no quiera ser el centro de atención. El aprendizaje requiere tiempo y madurez.

Tiempo de malabarismo

Cuando el niño comienza la guardería o la escuela, todo cambia nuevamente. Los padres Pueden sentir una mezcla de excitación y nerviosismo y se preguntarán cómo se adaptará su niño a su nueva situación y cómo harán malabarismos con la familia y el trabajo.

Aquí hay algunos consejos:

  • Sér lo más organizados posible; hacer listas, marcar eventos en el calendario y preparar comidas con antelación.
  • No se preocupen si no está todo limpio y ordenado.
  • Mantengan las rutinas siempre que sea posible.
  • Planeen un tiempo de calidad con los hijos, pueden organizar actividades al aire libre o simplemente Jugar con ellos a la hora del baño o compartir una historia para dormir.
  • Si un día las cosas salen torcidas, y uno de los miembros de la pareja está enfadado o desanimado, es bueno que admita "lo siento, he tenido un día difícil" y se refugie en un buen abrazo. Y recuerden que tomarse tiempo para cuidarse es fundamental, esto ayudará a reunir la paciencia, energía y comprensión que se necesita para llevar el día a día.