¿tu amistad es sana o tóxica?

La adolescencia es una etapa en la que las amistades lo son todo. Los amigos se convierten en parte esencial de tu día a día: compartís secretos, os apoyáis mutuamente, reís juntos y, en muchos casos, os acompañáis en los momentos difíciles. Pero… ¿Qué pasa cuando una amistad deja de hacerte sentir bien? 😟

Puede que estés en medio de una amistad tóxica y ni siquiera lo sepas. En este artículo te voy a contar cómo identificar si una amistad es tóxica, qué señales debes tener en cuenta, y lo más importante: qué puedes hacer si te encuentras en esa situación.

🔎 ¿Qué es exactamente una amistad tóxica?

Una amistad tóxica es aquella en la que una de las partes (o ambas) sufre más de lo que disfruta. No hablamos de un malentendido puntual o de una discusión (eso pasa en todas las relaciones), sino de un vínculo que te hace sentir mal de forma constante 😔.

Una amistad sana debería hacerte sentir:

  • Valorada/o
  • Escuchada/o
  • Libre para ser tú misma/o
  • Segura/o emocionalmente

En cambio, una amistad tóxica puede hacerte sentir:

  • Ansiosa/o o estresada/o
  • Culpable sin motivo
  • Menos que la otra persona
  • Agotada/o emocionalmente

Y eso, no es normal ni sano, aunque os conozcáis desde hace años.

🚩 Señales claras de una amistad tóxica

A veces, es complicado ver las cosas con claridad cuando estás dentro de la relación. Pero si te sientes incómoda/o, es momento de observar con más atención. Aquí van algunas señales de alarma que indican que podrías estar en una amistad tóxica:

1. Te critica constantemente (aunque diga que es "broma")

Si siempre se ríe de ti, te hace comentarios negativos disfrazados de humor o te compara con otras personas para dejarte mal… eso no es una broma, es maltrato psicológico.

2. No respeta tus límites

Insiste en que hagas cosas que no quieres, te presiona para contarle secretos, o se enfada si decides pasar tiempo con otras personas. Esto no es cariño, es control.

3. Te hace sentir culpable todo el tiempo

¿Te suelta frases tipo "nunca estás cuando te necesito", "has cambiado mucho", o "ya no eres como antes"? Si constantemente te hace sentir culpable por tener tu propia vida, algo no va bien.

4. Es egoísta y todo gira en torno a su vida

Una amistad debe ser un ida y vuelta. Si solo habla de sus problemas, ignora los tuyos y espera que estés ahí 24/7 para ella/él, pero nunca está cuando tú necesitas algo… 🤔

5. Te hace sentir insegura/o o inferior

Si después de pasar tiempo con esa persona te sientes peor contigo misma/o, menos capaz o menos valiosa/o, es una señal muy clara de toxicidad.

6. Te manipula emocionalmente

Frases como “si fueras mi verdadera amiga harías esto” o chantajes emocionales (“si no haces esto por mí, ya verás”) son formas de manipularte. Y no son aceptables.

7. Habla mal de ti a tus espaldas

Si te enteras de que cuenta tus secretos, te critica con otros o genera rumores sobre ti, esa persona no te respeta ni te cuida.

🤔 ¿Por qué cuesta tanto identificar una amistad tóxica?

Buena pregunta. Muchas veces, cuando estás dentro de una relación de este tipo, te cuesta ver lo que está mal. Algunas razones comunes:

  • Lleváis mucho tiempo siendo amigas/os
  • Ha habido momentos bonitos que quieres conservar
  • Tienes miedo de quedarte sola/o
  • La otra persona te manipula emocionalmente
  • No quieres generar “drama”

Todo esto es comprensible, pero no debe ser una excusa para quedarte en una relación que te daña. A veces, crecer implica poner límites, aunque duela.

🧠 El impacto de una amistad tóxica en tu salud mental

Una relación tóxica no solo afecta tu estado de ánimo: puede dañar tu autoestima, aumentar tus niveles de ansiedad, hacerte dudar de ti misma/o y afectar tus otras relaciones. Algunas consecuencias que puedes notar son:

  • Dificultad para confiar en otras personas
  • Aislamiento social
  • Cambios de humor frecuentes
  • Insomnio o problemas para concentrarte
  • Tristeza persistente

Si estás sintiendo alguna de estas cosas, no lo ignores. Es importante hablarlo y buscar apoyo.

✅ Cómo actuar si sospechas que tienes una amistad tóxica

Vale, ya has identificado que algo no va bien… ¿y ahora qué?

1. Haz una pausa y analiza la relación

Piensa: ¿cómo me siento después de estar con esta persona? ¿Me siento libre, cuidada/o y valorada/o… o al contrario?

A veces escribirlo en un diario puede ayudarte a ver la situación con más claridad.

2. Habla con alguien de confianza

Contar lo que te pasa a un adulto de confianza, a otro amigo, a un orientador del instituto o incluso a tus padres puede darte una perspectiva más objetiva. No estás sola/o.

3. Planta cara con asertividad

Si te sientes con fuerzas, habla con la persona y exprésale cómo te sientes. Usa frases como:

“Me siento mal cuando haces ese tipo de comentarios. Me gustaría que lo tuvieras en cuenta.”

“Necesito que respetes mi espacio y mis decisiones.”

Hazlo con calma, sin atacar, pero dejando claro tus límites.

4. Aléjate si no hay cambio

Si después de hablar, las cosas no mejoran o incluso empeoran, es momento de alejarte. No necesitas una justificación. Tu bienestar es motivo suficiente 💪

Y recuerda: cortar una relación tóxica es un acto de amor propio, no de egoísmo.

5. Rodéate de personas que te hagan bien

Elimina lo que te resta y acércate a quienes te suman. Hay personas maravillosas ahí fuera que te aceptarán tal como eres. Tú mereces eso.

📱 ¿Y si la amistad tóxica es online?

Hoy en día, muchas relaciones se dan por WhatsApp, Instagram, TikTok o Discord. Y sí, también pueden ser tóxicas.

Si alguien te controla por redes, te exige que estés conectada/o todo el rato, revisa tus likes, o te hace ghosting para luego reaparecer con exigencias... eso también es una relación tóxica digital 🚨

Pon límites claros, bloquea si es necesario y cuida tu espacio virtual tanto como el real.

👩‍🏫 ¿Qué dicen los expertos en psicología?

Según el Colegio Oficial de Psicología de Madrid, las amistades tóxicas pueden tener consecuencias similares a las de una relación de pareja tóxica. Identificar los patrones de control, abuso emocional y manipulación es clave para protegerse a tiempo. Además, recomiendan trabajar en la autoestima y en las habilidades sociales para fortalecer relaciones sanas y evitar caer de nuevo en dinámicas dañinas.

🧩 ¿Y si yo soy la persona tóxica?

Este punto también es importante. Si al leer esto, te das cuenta de que tú también has tenido actitudes de este tipo (críticas constantes, celos, control…), no te castigues. Lo importante es reconocerlo y trabajar en ello. Puedes:

  • Pedir disculpas sinceras
  • Escuchar sin justificarte
  • Aprender a respetar los límites de los demás
  • Acudir a un profesional si lo necesitas

Cambiar es posible. Y todos estamos en proceso.

💬 Test rápido: ¿Tu amistad es sana o tóxica?

Contesta con sinceridad:

  1. ¿Puedes ser tú misma/o con esa persona sin miedo a ser juzgada/o?
  2. ¿Sientes que os cuidáis y os apoyáis mutuamente?
  3. ¿Te sientes tranquila/o y feliz después de verla/hablar con ella?
  4. ¿Respeta tus decisiones y tu espacio personal?

Si respondes a la mayoría, es probable que tu amistad sea sana 😊. Si has respondido no a varias... es hora de hacer una reflexión.

💡 Tú mereces amistades que te sumen, no que te resten ✨

En la adolescencia, aprender a identificar una amistad tóxica es un paso clave para tu bienestar emocional. No tienes que aguantar por miedo, costumbre o culpa. Las amistades sanas existen y merecen tu energía.

Aprender a poner límites, alejarte de lo que te hace daño y cuidar tu salud mental también es parte de crecer 💖

Y si necesitas ayuda, no dudes en hablar con un adulto, un orientador o incluso contactar con profesionales. En España, puedes acudir a:

  • Teléfono de la Infancia de Fundación ANAR: 900 202 010 (gratuito y confidencial)
  • Fundación FAD Juventud
  • Instituto de la Juventud (INJUVE)

📌 En resumen:

  • Una amistad tóxica te hace sentir mal de forma constante.
  • Hay señales claras: Control, manipulación, críticas, culpa, egoísmo…
  • No estás sola/o, y no estás exagerando.
  • Puedes hablarlo, poner límites o alejarte.
  • Tu bienestar emocional es lo más importante.

🌱 Rodéate de personas que te hagan florecer, no que te marchiten. Tú vales mucho. Cuídate.