Está claro que cuando a una chica le gusta un chico, espera que sea él quien dé el paso de declararse y de arriesgarse al rechazo.

Sin embargo, los tiempos están cambiando y merece la pena ser flexible, es decir, prepararte mentalmente para confesar tus sentimientos a alguien que quieres de verdad.

¿Cómo puedes llegar hasta ese punto? Pues en primer lugar, debes tener paciencia, es decir, observar los hechos, valorar los gestos y detalles que tiene él. Darte cuenta de si de verdad tiene algún interés en ti o es sólo un tonteo o un pasatiempo. Por tanto, cuando ya estés cansada de esperar, y ves que él no ha hecho nada, entonces, te sentirás con una valentía total, a la hora de expresar tus sentimientos y poner las cartas sobre la mesa. A partir de allí, comenzará de verdad el amor o el juego habrá terminado si él no busca lo mismo que tú.

En caso de que te diga que no, puedes estar tranquila porque te habrás liberado al alejarte de alguien que te resta tiempo en la búsqueda de tu verdadero amor. No te centres al cien por cien en alguien cuando no te ha garantizado que quiera tener un romance contigo. Hasta entonces, sigue con tu vida, hazte valer y recuerda que existen otros muchos hombres.

Una vez asumido el desamor, lo que tienes que hacer es llamar por teléfono a tus amigas de más confianza para hablar de lo sucedido, llorar y desahogarte. El tiempo dirá todo lo demás. 

En muchas ocasiones, se tarda mucho tiempo en decir te quiero porque te produce terror sentir el vértigo de comprobar que el otro no siente lo mismo que tú. Sin embargo, la realidad es que desde la experiencia que te aportan los errores del pasado, deberías aprender a ser sincera contigo misma mucho antes para no engañarte.

El desamor también se supera, así que mucha fuerza.