citologia anormal

¿Qué significa tener una prueba de Papanicolaou anormal y qué se hace a continuación?

La mayoría de las veces, un resultado de prueba anormal no es cáncer.

Millones de mujeres se hacen una prueba de Papanicolaou (citología vaginal) cada año para detectar cáncer de cuello uterino. (Parte inferior del útero, que conduce a la vagina). El procedimiento es simple y es parte de una visita regular a un ginecólogo. Un médico limpia algunas células de su cuello uterino y las envía a un laboratorio donde un especialista las mira bajo un microscopio para determinar si se ven normales o anormales.

A veces la prueba resulta un poco incómoda. Pero afortunadamente, la mayoría de los resultados de la prueba de Papanicolaou suelen ser normales, lo que significa que se puede dar un suspiro de alivio y programar la próxima visita de rutina.

Sin embargo, entre el 2% y el 5% de las mujeres que se hacen una prueba de Papanicolau, llamada así por el autor del examen, George Papanicolaou, tendrán un resultado anormal. Si eres una de esas mujeres, probablemente estés más que un poco nerviosa acerca de lo que realmente significa "anormal". Esto es lo que necesitas saber.

¿Qué puede causar una prueba de Papanicolaou anormal?

Para empezar, las células anormales en los resultados de la citología no necesariamente significan que tienes cáncer. Puede haber muchas razones diferentes por las que una prueba de Papanicolaou puede ser anormal, el más común es el virus del papiloma humano.

El virus del papiloma humano (VPH) es responsable de casi todos los casos de cáncer de cuello uterino. Pero las pruebas positivas para el virus no significan que realmente se tenga cáncer. Alrededor del 90% de las veces, el virus, que se transmite sexualmente, desaparece por sí solo, sin dejar evidencia alguna a su paso. Muchas veces las pacientes tienen VPH y están completamente asintomáticas, algunas pueden tener síntomas leves pero aún así recuperarse completamente.

Cuando el VPH conduce a cambios precancerosos o cancerosos en las células del cuello uterino, esas células de crecimiento anormal se clasificarán como leves, moderadas o graves, y el médico determinará el mejor plan de tratamiento.

¿Qué otra cosa puede causar una prueba de Papanicolaou anormal además del VPH?

Otras infecciones de transmisión sexual pueden ser las culpables, como la clamidia, la gonorrea o, en casos muy raros, el herpes. Las infecciones por levaduras también pueden causar cambios en las células del cuello uterino. Todos estos pueden ser tratados.

En raras ocasiones, incluso la inflamación, tal vez por tener relaciones sexuales recientemente, puede conducir a un resultado anormal de la prueba de Papanicolau.

Más adelante en la vida, la menopausia también puede producir cambios en las células del cuello uterino. Cuando no hay mucho estrógeno, las células pueden imitar las condiciones precancerosas.

¿Cómo se procede si la prueba de Papanicolaou sale anormal?

Una citología puede indicar que algo podría estar mal, pero no puede decir cuál es el problema. Si los resultados de la prueba de Papanicolaou son anormales, el médico querrá hacer un seguimiento para averiguar qué ocurre, si es que ocurre algo.

El médico puede ordenar una segunda prueba, una que busque ADN del VPH. Esto le dirá si el VPH es una causa probable de los resultados anormales. Incluso puede decirle si tiene una de las cepas específicas (a menudo HPV 16 o 18) que causan cáncer de cuello uterino, aunque no indicará si se tiene la enfermedad.

El siguiente paso es una colposcopia, que es cuando un médico observa de cerca el cuello uterino con un dispositivo parecido a un microscopio llamado colposcopio. Con frecuencia, se aplica una solución diluida de vinagre en el cuello uterino para cambiar temporalmente el color de las áreas anormales, haciéndolas más fáciles de ver para el médico.

No todas las pruebas de Papanicolaou anormales requieren una colposcopia, especialmente en mujeres más jóvenes, ya que su riesgo de tener cáncer de cuello uterino es muy bajo, en ocasiones se puede optar por repetir una prueba de Papanicolaou en seis meses o un año, para ver si los resultados siguen siendo anormales.

Además de una colposcopia, si los médicos lo creen necesario harán una biopsia, que consiste en extraer una pequeña muestra de tejido o células para realizar más pruebas en el laboratorio. Una biopsia le indicará específicamente si tiene cáncer o cambios precancerosos. Si el resultado de la biopsia confirma que hay una condición precancerosa, el paciente generalmente requiere un tratamiento que elimine la afección precancerosa.

En general, las mujeres menores de 30 años deben hacerse una citoñogía cada tres años a partir de los 21 años. A partir de los 30 años, las mujeres deben hacerse una prueba de Papanicolau más una prueba de VPH cada cinco años. (Eso sigue siendo cierto ya sea que hayas sido vacunado o no contra el VPH. Las vacunas no protegen contra todas las cepas del VPH.) Si estás embarazada cuando es el momento de tu prueba de Papanicolaou, la prueba todavía se puede hacer como de costumbre. Los médicos incluso pueden hacer un seguimiento de los resultados anormales de la citología con una colposcopia si es necesario.

Cada año, casi 13.000 mujeres son diagnosticadas con cáncer de cuello uterino y alrededor de 4.000 mueren a causa de la enfermedad. Pero la mayoría se pueden prevenir si las pacientes acuden al médico para el seguimiento apropiado.