Alternativas naturales para mantener sanos a los más pequeños este otoño

Aportar los niveles de energía y los nutrientes necesarios que requieren los niños para su desarrollo forman una parte importante de nuestras responsabilidades como padres. Si estás en busca de suplementos alimenticios o complementos naturales para los más pequeños de la casa, te compartimos algunas alternativas que puedes encontrar en el herbolario medicinal que pueden resultarles beneficiosos para su organismo.

La infancia es una de las etapas más importantes y en la que debemos tomar muy en serio las vitaminas y nutrientes que incluimos en la dieta diaria de nuestros pequeños. Un niño que se alimenta de manera equilibrada puede mejorar su salud y sistema inmune de manera considerable al incorporar algunos de los elementos que en este artículo analizaremos.

Antes de iniciar, nos gustaría remarcar la importancia de contar con la supervisión de un especialista. Consulta a tu pediatra de confianza antes de incluir cualquier complemento a la dieta de tus hijos, ya que así evitarás cambios innecesarios en su metabolismo.

Vitamina C

Aunque es posible encontrar suplementos de Vitamina C en el mercado elaborados por laboratorios de gran prestigio, también se puede obtener de manera natural, como puede ser en los limones, naranjas o pomelos. La fruta es un alimento que no debe faltar nunca en la dieta de los niños. Uno de los muchos efectos positivos que tiene tomar Vitamina C, es que ayudará a reforzar el sistema inmune, además de actuar como antioxidante y mejorar la condición de los huesos, cartílagos y articulaciones.

Jalea Real

Aunque se le ha asignado este nombre comercialmente, es un producto de color blanco con un grado de acidez y con una textura cremosa que se obtiene de manera natural. La jalea real es una sustancia que obtienen las abejas obreras con el objetivo de alimentar a la abeja reina y a las larvas de una colmena. Aunque una parte importante de esta jalea está conformada por agua, se han podido encontrar proteínas y lípidos en su composición. Las vitaminas principales que obtendrás son B1, B2, B5 y B6.

Omega-3

Los omega-3 están catalogados como ácidos grasos esenciales, como consecuencia, nuestro organismo no es capaz de generarlo por sus propios medios. Es recomendable incorporar una cucharada al día de un complemento a base de omega-3 como el aceite de hígado de bacalao. En caso de que quieras incorporarlo a través de los alimentos, puedes hacerlo a través del pescado azul, nueces y algunas otras fuentes de origen vegetal. El desarrollo cognitivo en los niños es esencial, y esto puede lograrse a través del omega-3 de tipo EPA y DHA.

Vitamina D

La vitamina D ayuda a la absorción de calcio por parte de los huesos. Aquellos niños que tienen dientes y huesos sanos serán menos propensos a sufrir lesiones graves ante las frecuentes caídas y las visitas al odontólogo serán mucho menos frecuentes. Se sabe que la principal fuente de vitamina D es el sol, por lo que se recomienda una exposición de al menos 10 minutos al día en condiciones seguras. También se pueden utilizar suplementos naturales que compensen la deficiencia de esta vitamina en el cuerpo.

Equinácea

Es una planta altamente eficaz para combatir los resfriados y aporta beneficios para el sistema inmunológico. Se puede utilizar como complemento alimenticio, pero es necesario contar con soporte de un especialista para las dosis. En el mercado existen muchos productos elaborados a base de equinácea que son de uso pediátrico, ideales para los más pequeños de la casa.