Dejar llorar o no dejar llorar: El debate eterno sobre el sueño infantil 😴👶
El sueño infantil es uno de los temas que más preocupan a las familias, sobre todo durante los primeros años de vida del bebé. Y dentro de este gran mundo del descanso nocturno, hay un debate que lleva años dividiendo a madres, padres y profesionales: ¿Es bueno dejar llorar a un bebé para que aprenda a dormir solo, o es mejor atenderle siempre que llora?
Si estás leyendo esto, probablemente estés agotada de no dormir, te preocupe hacer lo correcto o simplemente estés buscando una respuesta clara. Vamos a hablar de todo esto sin rodeos, con información actualizada, desde un enfoque respetuoso, y, sobre todo, realista. 💡
🧠 ¿Por qué lloran los bebés cuando van a dormir?
Antes de meternos en el debate, es importante entender qué significa el llanto para un bebé. El llanto es su principal forma de comunicación. A través de él expresan hambre, sueño, incomodidad, miedo, necesidad de contacto… ¡Todo!
Durante la noche, muchos bebés lloran simplemente porque no saben dormirse sin ayuda. No es que estén "manipulando" ni intentando llamar la atención porque sí. Lo hacen porque lo necesitan. Y eso, como madres y padres, nos genera muchas dudas: ¿le estaré malacostumbrando si le cojo? ¿Y si le dejo llorar un poco? ¿Hasta qué punto es bueno o malo?
🛌 El método “Estivill” y otros similares: ¿dejar llorar funciona?
Uno de los métodos más conocidos para enseñar a dormir a los bebés de forma autónoma es el método Ferber, popularizado en España por el doctor Eduard Estivill.
Se basa en lo que se llama entrenamiento del sueño, y consiste en dejar que el bebé llore durante periodos progresivamente más largos antes de acudir a calmarlo, sin cogerlo en brazos. La teoría es que así aprenderá a dormirse solo y a asociar el sueño con la calma, no con la presencia constante del adulto.
¿Funciona?
Sí, en muchos casos funciona a corto plazo. El bebé termina durmiendo solo. Pero esto no significa necesariamente que haya aprendido a autorregularse emocionalmente. Lo que ocurre en muchas ocasiones es que deja de llorar porque asume que no va a recibir respuesta. 😔
Varios estudios recientes, como los publicados en la Asociación Española de Pediatría (AEP) y por expertos del Instituto de Investigación de Sueño Infantil, advierten que aunque el entrenamiento del sueño puede mejorar los patrones de sueño, no es inocuo para todos los bebés ni para todas las familias.
👉 Importante: No es lo mismo dejar llorar acompañando y consolando, que dejar llorar sin ningún tipo de respuesta.
💔 ¿Qué dicen los expertos sobre dejar llorar?
Los expertos no están del todo de acuerdo. Existen posiciones encontradas y, como en casi todo en la crianza, no hay una única verdad universal. Veamos lo que dicen las fuentes más relevantes:
✔ La Asociación Española de Pediatría (AEP)
La AEP no recomienda un único método de sueño, sino que anima a las familias a buscar el que mejor se adapte a sus necesidades, siempre respetando el desarrollo y bienestar del niño. Insiste en que no se debe dejar llorar a un bebé menor de 6 meses, ya que no tiene la madurez suficiente para calmarse solo.
✔ UNICEF y la OMS
Ambas instituciones defienden una crianza sensible y con apego, que implique responder a las necesidades del bebé. Según UNICEF, “responder al llanto de los bebés ayuda a que se sientan seguros y desarrollen un apego sano”.
✔ Asociación Española de Psicología Perinatal
Desde la psicología se alerta del posible impacto emocional que puede tener en algunos bebés ser dejados llorar sin consuelo frecuente. Hablan de la importancia de regular el sistema nervioso del bebé a través del contacto y la atención.
🧸 ¿Y qué pasa con la evidencia científica?
Aquí viene lo más interesante: los estudios sobre dejar llorar tienen resultados muy variados, y en gran parte esto se debe a que cada bebé y cada familia es diferente.
Algunos estudios (Middlemiss et al., 2012) muestran que, incluso cuando los bebés dejan de llorar al aplicar métodos de entrenamiento, siguen teniendo niveles altos de cortisol (la hormona del estrés). Es decir, aparentemente se calman, pero internamente siguen estresados.
Por otro lado, investigaciones más recientes (Price et al., 2012; Gradisar et al., 2016) indican que métodos de entrenamiento gradual no generan efectos negativos si se aplican con sensibilidad y adaptados a la edad del niño.
🎯 Conclusión: no se trata de blanco o negro, sino de ver cómo se hace, en qué momento y con qué bebé.
❤️ Alternativas respetuosas al dejar llorar
Si dejar llorar no te convence (y es totalmente válido), existen otras formas de ayudar a tu bebé a dormir de manera más gradual y respetuosa:
1. Método No Llorar (propuesto por Elisabeth Pantley)
Conocido como el método del “Sueño sin lágrimas”, propone una serie de pasos suaves y sin llanto para ayudar al bebé a dormirse, basados en rutinas, contacto y mucha paciencia. No es rápido, pero es amable.
2. Colecho consciente
Dormir cerca del bebé (en la misma cama o en cuna sidecar) puede facilitar el descanso tanto para el peque como para ti, y reduce el llanto nocturno. Eso sí, siempre siguiendo las recomendaciones de seguridad del Ministerio de Sanidad.
3. Acompañamiento progresivo
Consiste en estar con el bebé mientras se duerme, y poco a poco ir reduciendo la presencia física o el contacto hasta que logre dormir sin ti, pero sin llantos prolongados.
🤱 ¿Y si lo estás haciendo “mal”?
Tranquila. Este no es un artículo para juzgar. Si alguna vez has dejado llorar a tu bebé porque no podías más, o si lo coges en brazos cada vez que llora, estás haciendo lo mejor que puedes con las herramientas que tienes.
No hay una única manera correcta de hacerlo. Hay familias para las que un método funciona y para otras que no. Lo importante es observar a tu bebé, respetar sus ritmos y también cuidar de ti. Sí, de ti también. Porque si tú no estás bien, es muy difícil que puedas estar disponible emocionalmente para él o ella.
💬 Testimonios reales de familias
“Nosotros probamos el método Estivill con nuestro hijo mayor, y sí que durmió solo rápido, pero ahora con la pequeña no lo vemos igual. Cada bebé es un mundo.” — Ana, 34 años.
“Yo no podía dejarle llorar. Hacía colecho y la dormía en brazos. Tardó más, pero lo conseguimos. Hoy duerme toda la noche y sin traumas.” — Marta, 30 años.
“No podía más con los despertares, lo intentamos con un acompañamiento gradual y fue la mejor decisión.” — Pablo, 38 años.
🧾 Consejos prácticos para mejorar el sueño infantil sin lágrimas
Aquí tienes algunas pautas que puedes empezar a aplicar desde hoy mismo:
- Crea una rutina relajante antes de dormir: baño, cuento, canción suave… algo predecible.
- Atiende las señales de sueño: bostezos, frotarse los ojos, estar inquieto...
- Ajusta los horarios: un bebé sobrecansado suele dormir peor y llorar más.
- Evita pantallas y luces fuertes al menos 1 hora antes de dormir.
- Ofrece contacto físico y seguridad: el apego no malcría, fortalece.
- Ten expectativas realistas: los despertares nocturnos son normales hasta los 2-3 años.
- Pide ayuda si lo necesitas: con pareja, familia, asesoras de sueño, pediatras, etc.
🌟 Entonces, ¿dejar llorar o no?
No hay una receta universal. Lo más importante es que tomes una decisión informada, que encaje con tu filosofía de crianza y con tu realidad familiar.
👉 Si decides aplicar un método, hazlo con acompañamiento, sensibilidad y nunca con bebés muy pequeños.
👉 Si prefieres un enfoque más respetuoso, también es válido, aunque el proceso sea más largo.
Lo que no es negociable es tu intuición como madre o padre. Confía en ella. 💖
📚 Fuentes consultadas
- Asociación Española de Pediatría (AEP)
- Ministerio de Sanidad, Gobierno de España: Guías de Sueño Infantil.
- UNICEF España: Crianza y apego seguro.
- Pantley, E. (2002). El sueño del bebé sin lágrimas. Ediciones Medici.
- Gradisar, M., et al. (2016). Behavioral Interventions for Infant Sleep Problems: A Randomized Controlled Trial.
- Middlemiss, W., et al. (2012). Asynchrony of mother-infant hypothalamic-pituitary-adrenal axis activity following extinction of infant crying responses.
🧡 En resumen
Este debate seguirá existiendo porque no hay una única forma de criar. Pero sí hay una manera de hacerlo con conciencia, con cariño y escuchando a tu bebé… y a ti.