Ayer Telecinco hizo historia con la final de Supevivientes que tuvo una audiencia millonaria. Sin duda, la gala fue muy larga y también muy intensa.

Pudimos ver como en la vida misma, las dos caras del éxito y del fracaso. Y es que, Sonia Monroy fue la gran derrotada del concurso, es decir, no pudo evitar llorar hasta el aburrimiento cuando supo que no fue la elegida para entrar en la final y que Rosi tuvo más apoyo que ella.

Este dato, realmente, resulta extraño teniendo en cuenta que la cantante había sido salvada de la nominación por el público en ocho ocasiones. Por ello, está  claro que no pudo evitar el sabor amargo de la decepción. Sin embargo, seguro que con el paso de los días es capaz de ver el lado positivo de esta situación y es que, Sonia Monroy ha conseguido mostrar en el concurso una imagen desconocida hasta el momento, más humana, luchadora y sencilla. 

Pues bien, la gran vencedora de la noche fue Rosa Benito que además, vivió un momento de mucha tensión con su marido Amador Mohedano. La realidad es que fue una tensión innecesaria en un día tan bonito y en este caso, creo que quien se equivocó fue Rosa al decirle a su marido que se callara en relación con los comentarios que hablaban sobre una posible amistad especial entre Rosa y Montalvo.

Más allá de esta cuestión, Rosa Benito es ahora mismo la reina de Telecinco. Y lo que está claro es que los colaboradores de Sálvame tienen mucha suerte en los concursos porque Belén Esteban también ganó Más que baile el año pasado. Tatiana Delgado tuvo un digno tercer puesto y la verdad es que se mostró feliz y agradecida. La verdad es que todas ellas merecían el triunfo pero sólo puede ganar una.