Una joven madre de cuatro hijas muere de cáncer cerebral y su mejor amiga las adopta.
Hay historias por el mundo que confirman que aún hay esperanza, aún hay personas que respetan y valoran a los demás al punto de confirmar que la amistad sigue teniendo futuro.
A Elizabeth Diamond le diagnostican cáncer cerebral en fase terminal y pide a Laura, su mejor amiga, si ella pueda hacerse cargo de sus hijas. Laura, madre de dos niñas, acepta sin dudarlo.
Elizabeth era una madre soltera de cuatro hijas, a la cual los médicos le informaron que su cáncer no tenía tratamiento. Debido a su devastadora noticia y tras hablar con su amiga, Laura aceptó sin dudar que cuidaría de las hijas.
Tras nueve meses de tratamiento, en abril de 2015, Elizabeth falleció por el cáncer cerebral y Laura, su marido Rico y sus dos hijas, acogieron en su hogar a Lily, Ella, Samona y Tara, con edades comprendidas entre los 5 y 12 años de edad.
A partir de ahí el mayor problema que tenía la familia de los Ruffino era poder mantenerse todos, lo cual se solucionó gracias a los vecinos y amigos, que por dicha causa llegaron a recaudar 24.000 dólares, cantidad suficiente para cubrir los gastos durante un tiempo.
Elizabeth Diamond fue de las fundadoras de un centro de bienestar Holístico, dedicando parte de su vida en ayudar y colaborar con los más necesitados. Actualmente miembros del centro y personas que recibieron la ayuda de Elizabeth, también colaboran con la nueva familia de las hijas para sacarlas adelante.